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"Cheng Lingling volvió en sí, murmurando mentalmente cuál era la relación entre Wang Hum y Su Qi.

"Esos pocos expertos del extranjero vinieron y están esperando en la sala de conferencias.

" Su Qi se cambió apresuradamente los zapatos, "Ve y reúnete".

Mientras caminaba hacia el exterior, Cheng Lingling parecía vacilante, Su Qi vio esto y preguntó: "¿Qué pasa?".

Cheng Lingling dijo, "Señor Cheng, nuestro intérprete tuvo un accidente hoy y se quedó atascado en la carretera, tardará al menos dos horas en llegar aquí, y estos expertos extranjeros saldrán de Jiangning en una hora.

" Su Qi frunció el ceño, "¿Entonces por qué sigues ahí parado? Sigue buscando otro intérprete!" "Ya hemos encontrado uno, pero el intérprete más rápido tardará media hora en venir, y media hora no es suficiente para lo que queremos hablar".

Cheng Lingling se quedó pensativo.

El pequeño ceño de Su Qi se frunció: "Pregunta si en la empresa hay alguien que hable idiomas extranjeros".

"Hay bastantes que saben inglés, pero el experto que vino es de Francia, y este experto sólo habla francés".

Al decir esto, Cheng Lingling pensó en algo y miró a Wang Hum.

Su Qi reflexionó un momento: "¿Y el traductor?".

"Muchas de las cosas que vamos a decir son términos profesionales y el traductor no traduce con precisión".

Mientras Su Qi pensaba en contramedidas, Cheng Lingling dijo de repente: "Señor Su, ¿por qué no dejamos que Wang Hum vaya a ser el traductor?".

Estas palabras hicieron que Su Qi se quedara helado, "¿Dejarle?".

Cheng Lingling asintió: "Hoy he visto a Wang Hum charlando con dos extranjeros, y habla muy bien francés e inglés".

La cabeza de Su Qi se quedó en blanco durante unos segundos.

"¿Todavía sabe francés?".

Wang Hum sonrió modestamente.

"He vagado por el extranjero durante un tiempo antes, sé un poco de lenguas extranjeras".

Cheng Lingling dijo tímidamente: "Sr.

Su, ya es esta vez, déjelo seguir, está bien tratar a un caballo muerto como a uno vivo".

Su Qi se volvió para mirar a Wang Hum, "Necesitamos un traductor ahora, ¿puedes hacerlo?".

Wang Hum se levantó y se abrochó la hebilla, "Puedo intentarlo".

Su Qi respiró hondo, en esta coyuntura, tenía que vencer a un caballo muerto, "Vale, si no sabes traducir algunos términos, puedes buscarlos".

"Estás menospreciando un poco a la gente".

Wang Hum no se lo tomó a pecho en absoluto.

Su Qi condujo a Wang Hum a la sala de conferencias, había varios extranjeros sentados dentro, y cuando vieron entrar a Su Qi, se levantaron y se dieron la mano.

"Sr.

Chatham, bienvenido".

Su Qi estrechó la mano del extranjero y miró a Wang Hum.

Wang Hum sonrió amablemente al gringo: "Bienvenido, m.

Chatham".

Hubo un destello de sorpresa en la expresión de Su Qi, Wang Hum la había impresionado una vez más.

Después de que el extranjero estrechara la mano de Wang Hum, varias personas se sentaron.

El intercambio que siguió fue tan poco especializado como Su Qi pudo hacerlo al principio, pero después de ver a Wang Hum traducir, la respuesta de Chatham fue buena.

A continuación, Su Qi deslizó algunas palabras más especializadas y, a juzgar por la expresión de Chatham, la traducción de Wang Hum no tuvo el menor problema.

Además, ninguno de los términos profesionales que Wang Hum tradujo de Chatham era incorrecto.

Esto hizo que Su Qi quedara una vez más impresionado por Wang Hum.

Este hombre tenía un talento profundamente arraigado.

Su Qi también se relajó del nerviosismo inicial y mantuvo una buena conversación con Chatham.

Pero, para su sorpresa, en mitad de la conversación, Chatham dijo que tenía un amigo en Japón que también tenía algo que decir, y proyectó directamente el videochat.

Al otro lado había un hombre de cinco años que se acercó e hizo una reverencia enseguida.

Dijo muchas cosas en un galimatías.

Su Qi estaba entumecido.

Primero miró a Chatham, que le preguntó: "¿No le dije antes de venir que tenía un amigo allí? ¿Tu traductor no habla japonés?".

Su Qi miró a Cheng Lingling, que ya tenía una gota de sudor apareciendo en su cabeza y su cara estaba pálida, "Me olvidé de eso con las prisas de hace un momento".

Estas palabras hicieron que el rostro de Su Qi se enfriara al instante
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