Donde Esta Tu Equipaje. [ 1 / 2]


La puerta de la agencia fue bloqueada por los seis tipos beligerantes y altivos de hatchet.

Sus ojos estaban llenos de sarcasmo y malicia mientras miraban a Trevor.

Trataban de chantajearlo ya que era un extraño.

Sin embargo, Trevor solo sonrió.

¿Qué les hizo pensar que era fácil chantajearlo? Dame 100 mil dólares 150 mil dólares como honorarios de la agencia.

De lo contrario, no te dejaré salir de mi agencia hoy, y mucho menos comprar una casa en Barlowtown.

Como Trevor permaneció en silencio, Ulises asumió que había intimidado con éxito a Trevor.

Como resultado, se sintió seguro de exigir dinero.

Trevor respondió con calma, ¿me estás amenazando? Los hombres de la puerta se amontonaron en el estrecho espacio.

El de pelo verde apretó el puño y esbozó una sonrisa siniestra.

Piensa lo que quieras.

Por cierto, tienes una maleta, ¿no? Páganos y te lo llevaremos.

No te preocupes, no es tan caro.

Solo te cobraremos 500 dólares.

¡Eso fue ridículo! Trevor solo tenía una maleta pequeña, pero estos hombres lo obligaban a pagar una cantidad tan grande.

No pudo evitar burlarse.

¿Llevarás mi maleta? Gran.

Me gusta mucho su servicio.

Pero me temo que no es tan fácil hacerme pagar por eso.

¿Qué? Al enterarse de que Trevor no estaba dispuesto a pagar, Ulises se enojó tanto que casi se rió.

Con todos sus hombres rodeándolo, ¿cómo se atreve un extraño a resistirse? La ira se elevó en el pecho de Ulises.

Maldita sea.

No digas que no te lo advertí.

Tú lo pediste.

¡Todos, vayan y denle una lección! En un abrir y cerrar de ojos, los hombres de Ulises atacaron a Trevor con sonrisas tortuosas.

No era la primera vez que Ulises chantajeaba a la gente.

Por lo general, la gente no se lo pensaría dos veces para pagar cuando los amenazaban.

Hubo algunos que fueron duros.

Pero también darían el dinero que Ulises exigió después de que sus hombres los golpearan.

Ah! Un grito devolvió a Ulises a sus sentidos, seguido de los sonidos apagados de los puños golpeando a la gente.

En solo un minuto, los seis hombres arrogantes cayeron al suelo, gimiendo de dolor.

¿Qué ha ocurrido? Sorprendido por la escena, Ulises tragó con fuerza y miró a Trevor, que sonreía débilmente
Olympus Scan
Olympus Scan
Serberus Scalation
Presentado